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jueves, 5 de diciembre de 2013

Caballeros medievales con brigantina hacia el 1500


Un tiempo después de volver de Burgos (y quedar impresionado por la escultura de Don Juan de Padilla ), haciendo una búsqueda de pintura gótica en internet me encontré con esta pintura.

No me lo podía creer, eran prácticamente los mismos ropajes, complementos y elementos defensivos que los de Don Juan.
                              Pintura del Museo de Lleida, fotografía obtenida de Wikimedia Commons

El cuadro:

Miracle de la Mare de Déu del Roser i el cavaller de Colònia

Se trata de una pintura sobre tabla, que se conserva en el Museo de Lleida, se cree que su autor podría ser Joan Pau Guardiola y que podría haber sido realizada entre los años 1500-1510, formando parte de un retablo de origen desconocido, pero del que se conserva otra tabla en el Museo Cau Ferrat de Sitges, precisamente la que representa a la “ Madre de Dios del Rosario”.

Los personajes:

Aparecen cuatro personajes en el cuadro.

Primer caballero:

El primer caballero, a la derecha del espectador, es un joven de larga melena al estilo del corte de pelo que se estilaba a finales del siglo XV y principio del XVI.
Viste un lujoso ropón, abierto por delante, un rico collar y un tahalí de cuero le cruza el pecho desde el hombro derecho, para sujetar una espada de la que podemos ver un arriaz curvo dorado y parte de una patilla dorada.
Las manos las lleva con guantes blancos y sostiene un rosario entre ellas.
Sobre el ropón lleva un manto.
También se puede ver un rico borceguí de piel blanca, decorado o “labrado”.


Segundo caballero:

El segundo caballero es un joven que va vestido de la siguiente manera:
                              Caballero con brigantina, cerca del 1500
http://commons.wikimedia.org/wiki/File%3AJoan_Pau_Guardiola-Miracle_de_la_Mare_de_D%C3%A9u_del_Roser_i_el_cavaller_de_Col%C3%B2nia-_Museu_de_Lleida.jpg


En la cabeza lleva un gorro, de color rojo, que nos recuerda a los que podemos ver en algunas esculturas cercanas al 1500.
Viste un jubón verde con cuello rígido o collar pequeño, de mangas ajustadas; era la prenda sobre la que vestir la cota de malla.
Bajo el jubón a nivel del cuello se aprecian los pliegues de la camisa interior.
Sobre el jubón lleva una lóriga de cota de malla de mangas cortas y que le llega por encima de medio muslo; los bordes de las mangas y de su parte inferior están realizados con varias hileras de anillas doradas.
Cubre sus piernas con calzas verdes.
Sobre la cota de malla viste una lujosa brigantina, toda ella de color dorada, y con claveteado igualmente dorado; como suele ser habitual esta prenda no lleva mangas y cubre como un chaleco hasta la cadera. Se abre por delante y se abrocha mediante correas de cuero con motivos dorados.

En los brazos a nivel de los codos podemos observar que lleva una codera de metal, parte de la armadura de brazos para proteger el codo, no es inusual ver en otros cuadros como los caballeros podían usar piezas sueltas de armadura según conveniencia.

En cualquier caso se trata en este caso de un codal lujosamente decorado, y seguramente específicamente realizado o preparado para vestirlo de esta manera.

En la cintura lleva un cinturón de color blanco con el mismo tipo de enganche en pasador que pudimos ver en la escultura de Don Juan Padilla y en las Sargas del Museo Provincial de Burgos.
Del cinturón sobre el costado derecho tiene una pequeña cartera o escarcela de piel o cuero de color blanco con hebilla dorada.
De la escarcela penden cinco cordones dorados, que terminan en cinco borlas de seda, igualmente de color dorado.
Por debajo del cinturón y de la escarcela sobresale la vaina de una daga o puñal, con la contera dorada,  repitiendo el esquema que pudimos apreciar en las Sargas de Burgos, y que veremos aún en infinidad de cuadros más.
Desde el hombro derecho un tahalí de cuero con  hebilla y remaches dorados cruza el pecho del caballero, de él pende sobre su costado izquierdo una vaina de espada vacía.
El caballero tiene cerca de sí dos espadas desenfundadas, lo cual está en relación con la historia del Milagro de la Virgen del Rosario y el Caballero de Colonia.
Por detrás del caballero podemos ver una espada con guarnición dorada, presentando arriaces curvados y patillas, y con el puño decorado con una tela de color roja. Esta espada parece descansar sobre una rodela en la que también podemos apreciar una manija dorada para asirla y el hueco para la mano.
Mientras que otra espada, desenvainada, descansa sobre la pierna del caballero, igualmente con guarnición dorada, de arriaces curvados y con patillas, ésta espada pertenecería al uno de los pajes que aparece por detrás del caballero.
Nuestro caballero lleva unos borceguíes de piel de color rojo que llegan hasta la rodilla, donde hacen una vuelta; y en su cara externa una apertura con varios cordones anudados, lo cual ayudaría a calzar este tipo de bota.

Los dos pajes:

Tras el segundo caballero aparecen dos hombres, a los que identificaré como pajes de éste, basándome tan sólo en que el artista les ha puesto en un segundo plano y se cubren la cabeza con sendas bonetes, dorado y verde, más sencillos.
El primer paje, lleva jubón, lóriga de cota de malla, una brigantina de color verde y calzas.
Mientras que en el segundo paje sólo podemos apreciar una brigantina de color rojo, con claveteado dorado.

Conclusión:

Ciertamente es un cuadro que se sale de lo habitual por la cantidad de detalles que nos aporta.
El valor de esta pintura radica en que nos permiten ver elementos del vestuario y de la panoplia de los caballeros de finales del XV o muy principio del XVI. En este caso podemos ver a un joven ricamente vestido y a un caballero y sus dos pajes equipados de un modo ligero, pero perfectamente protegidos.
Nos permite además ver en realidad como vestían aquellas prendas, como las ponían o combinaban, así como conocer el colorido de las mismas.
En las próximas entradas iremos viendo como las formas de combinar el vestuario y su panoplia los hombres de armas y caballero de la Edad Media fue siempre variadísima.

 Espero que os haya gustado esta entrada sobre una pintura realmente excepcional.

 Fuentes:



4 comentarios:

  1. Había visto el cuadro por Internet. Es una maravilla. Sobre todo para los que estudiamos el vestido. :-)
    El personaje lleva gorra de media vuelta, de moda a finales del siglo XV.
    Ya no se me olvida que es una brigantina.

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    1. Sí, es un cuadro realmente precioso.
      Veremos muchas brigantinas en este blog, porque fue la pieza corporal defensiva más usada en la Península Ibérica durante la segunda mitad del siglo XV.
      Gracias por tu indicación, tan certera como siempre.

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  2. Respuestas
    1. Me alegro de que te haya gustado; este caballero representa la transición del siglo XV al XVI, época realmente muy interesante.

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